No sé si hace falta escribir un relato. Cambia rodillas por cadera en el del año pasado (K21 2014) y añade 12 minutos al tiempo, quizás porque faltaron mis referencias (Santi, John, Fernando, Tere) aunque mas bien creo porque no consigo ir rápido, y no ha cambiado nada.
La idea era no apuntarme a ninguna carrera durante unos cuantos meses. Y ahí estaba el 11 de Julio por cuarto año consecutivo en la plaza de San Bernardo, Los Silos a las 15h con un dorsal en la mano. Muchos conocidos saludaron y a todos quería dar mis explicaciones, pero ya doy vergüenza. Siempre quejándome pero no paro de correr. Ojalá pudiera parar, ojalá pudiera dejar de quejarme. Supongo que eso ya es un refrán que se repite demasiado pero la música moderna es así. Hasta cansar a los oyentes...
Pero si he parado mucho... A día 11 del mes solamente había hecho 7km trotando con el grupo de Faro a Faro de Almáciga hasta Afur y una vuelta de 11km en Las Vegas. Lo malo es que tampoco he hecho ningún otro tipo de deporte porque estoy a tope de trabajo y mi tiempo libre se limitó a comer y dormir. O sea que quizás ahora se empieza a notar la falta de entrenamiento. O una cosa o la otra, pfffff.
Decidí calentar un buen rato y estirar también ya que la carrera sale por asfalto "a toda ostia" (mi primer kilómetro del año pasado a 3:45 y los primeros desaparecieron en cuestión de segundos...)
Empecé sufriendo, demasiado asfixiado para el ritmo que llevaba. Juan Alonso de 7Raid me pasó y comentó vacilando "calentaste demasiado..." Una parte de mi cabeza me decía "da igual, a disfrutar de poder estar aquí". El otro lado de mi cabeza estaba furioso, decepcionado, gritando "POR QUÉÉ??????". No hay respuesta, no puedo correr y punto. ¿Son mis piernas?¿Son mis pulmones?¿Falta algo en mi sangre?¿Qué es lo que falla? Ya no me vale que me digan "descansa" porque quiero que me explican el porqué.
Bueno, no hay tiempo para estar pensando en esto y no quiero, así que sigo como puedo, siempre exageradamente asfixiado sufriendo y decido intentar mantenerlo así hasta la subida en el sendero porque sé que caminando, por muy fuerte que sea la subida, voy mas cómodo. Y así sucede. Me voy encontrando mas a gusto recuperando aire y sensaciones sin perder mas posiciones. Cuando me adelanta un compañero de categoría de Atlantes Trail decido apretar para que no se me escape. Los dos adelantamos a una considerable cantidad de corredores pero no consigo ponerme directamente detrás de él. Alcanzo al amigo Jose Rodriguez, el Ironman (jeje) de Aguere Triatlón y en una breve pausa de respiración consigo soltar alguna palabra. Llegamos mas o menos juntos a Erjos. Un poco antes de llegar al avituallamiento me tomo un gel y bebo bastante agua que ahí vuelvo a llenar, tomo un par de trozos de naranja y aunque intenté no perder mucho tiempo, tanto mi compañero de categoría como Jose habían ya desaparecido de ahí. Queda una mini-subida a unas antenas y luego pista en bajada. Son varios kilómetros y no puedo permitirme volver a ir como en la salida, hay que dosificar y controlar los dolores de espalda y cadera. La cadera no tarda nada en empezar a quejarse y busco la manera de correr que menos molesta. Creo que solamente me adelantaron dos personas, esperaba peor. Después de un kilómetro el dolor de la cadera desaparece pero noto pinchazo en la espalda, así que no cambia nada realmente. Pero adelanto yo a dos corredores, gran sorpresa positiva para mi. No llevaba el Garmin pero me hacía pensar que tan lento no iba.
Poco a poco también fue desapareciendo el dolor de espalda, acabó la pista y empecé la bajada con cuidado pero gradualmente soltándome. Y siempre lo mismo. Probablemente es peor para mi cadera pero no me suele doler en las bajadas y disfruto mucho. La primera mitad es muy muy rápida y el final más técnico. Voy recuperando puestos, me anima Jose cuando le adelanto y cuando llego de nuevo al pueblo de Los Silos veo a mi compañero de categoría unos 100m delante. Queda poco mas de un kilómetro y veo posibilidades de acercarme a él. Aprieto todo lo que puedo al cuerpo destrozado que tengo y en el último cruce le tengo ya a 20 metros. Los amigos me animan gritando mi nombre. Les mando a callar, señalando al hombre delante que no quiero que se entere que le estoy pisando los talones porque la única manera de adelantar sería por sorpresa, no me quedaban fuerzas para esprintar. No sé si sospechó algo pero obviamente dio todo en los últimos 50 metros y todos mis intentos para adelantar quedaron en vano. Pero lo intenté!! Y valía la pena porque luego resultó ser la lucha por el tercer puesto en el podium M50... Bonita anécdota que se repite a menudo en las carreras. Dos años antes sí que conseguí apretar lo suficiente para ganarme el primer puesto en M50 en los últimos 300m en el mismo sitio. Y en Noviembre en el Castañate las patas perdí el sprint final por el primer puesto en los últimos 50 metros, cogido totalmente por sorpresa mientras saludaba a Marce que sacaba fotos. Detalles divertidos para unos matados que llegan ahí por el puesto 60, no solamente compiten los 3 primeros!
Llego a meta como siempre (no sé si hay foto este año) y sin pensarlo ni quererlo mi reacción es sentarme en una silla con la cabeza entre las manos. Después de unos segundos, de repente, me doy cuenta que quizás me pillan otra vez así en foto y casi de un salto me pongo derecho. Jajaja. Uff, creo que no me pillaron.
Desgraciadamente he vuelto a machacar mucho mi cadera y llevo dos días cojeando y con dolores por la noche. Aunque mucho mejor ya mientras escribo todo esto. Está claro que si intento correr rápido, lo pago después con fuertes dolores. Quiero probar hacer algo mas de distancia a trote suave para ver si eso lo aguanto mejor. Quizás, si no paso nunca de ritmo "ultra" evito los problemas porque no creo que voy a conseguir parar de momento.
RESULTADOS