Todo el año voy de carrera en carrera. Entre semana entreno poco, las competiciones son los entrenamientos y para carreras hasta 30km no planifico nada especial para prepararlas. Pero luego, cuando voy a participar en distancias mayores intento tomármelo un poco mas en serio con salidas específicas, en general, incluyendo partes del recorrido para tener así una mejor idea de lo que me va a pasar el día de la carrera. Y cada vez me sorprende que disfruto tanto de estos entrenamientos que son una buena razón para apuntarme a mis retos. Sobre todo los paisajes que me encuentro por el camino me suelen dejar boquiabierto.
Así ya publiqué hace dos semanas las fotos del entreno en el Teide. Este fin de semana lo busqué mas cerca para hacer dos tramos mas de la Bluetrail, aunque sea en ida y vuelta al ir solo y tener que volver al coche.
El primero fue Ifonche - Vilaflor, unos 10km (20 ida y vuelta). No es la primera vez que lo hago pero cada vez me sorprende. En un principio no hay mucho desnivel entre los pueblos de Ifonche y Vilaflor pero el sendero oficial no va por el camino mas fácil. Tardé 2h30 en ir y volver y se me hizo de noche los últimos 15minutos de la vuelta. Iba preparado, llevaba el frontal. La luz con el sol ya muy bajo deja aún mas impresionante los paisajes y a la vuelta las nubes subieron al mismo tiempo que oscureció teniendo que meterme en una escena de película de horror entre los pinos, la niebla y los últimos rayos de sol. Guapo !
Dos días mas tarde volví a subir para hacer esta vez el tramo Vilaflor - Guajara. No había hecho el tramo de Vilaflor hasta paisaje lunar ya que lo suelo hacer desde Cruz de Tea, Granadilla o Las Vegas. Los primeros kilómetros son terribles. Subida muy fuerte y piedras tan irregulares que no doblar los tobillos es prácticamente imposible. Luego el resto ya lo conocía. Llegué al cruce de sendero donde empieza la bajada a 7 cañadas en 1h50, tranquilo sin prisa, probablemente el ritmo que llevaría en la Bluetrail. Hacía muuucho viento ahí arriba. Subí a la cima de Guajara y un par de veces me escondí detrás de una roca cuando veía llegar las rachas con torbellinos incluidos, daba miedo. En la bajada por la parte norte de Guajara iba acojonado entre poder perder el equilibrio en las rachas y que podría caer alguna piedra. Luego bajé por el Valle de Ucanca donde siempre me pierdo el camino y termino trepando piedras para recuperarlo. Ya bajé 3 veces por ahí, cada vez por un sitio diferente...Qué desastre soy pero tampoco está marcado.
De nuevo se me hizo de noche antes de llegar a Vilaflor, pero esta vez no me hizo mucha gracia. Igual que dos días antes, las nubes subieron y la luz del frontal se reflejaba en la niebla, dejándome ver muy poco. El último kilómetro es muy complicado de bajar corriendo sin ver donde poner los pies y después de torcerme una vez bastante fuerte el tobillo izquierdo, decidí tomar todo el tiempo que sea y no arriesgar. Ya me veía con un yeso en la Bluetrail... De hecho, no entiendo que no se me hinchó, al día siguiente apenas dolía un poco. Tuve suerte. Pero volví a disfrutar intensamente de esos últimos entrenos. Ahora solo queda descanso y esperar ansiosamente la salida en Los Cristianos el viernes a las 00h00...
1 comentario:
MUCHA SUERTE AMIGO MIO Y SOBRE TODO CABEZA PARA ESE IMPRESIONANTE RETO.ESTAREMOS TODOS CONTIGO.UN ABRAZO.FERNANDO AGUILAR
Publicar un comentario