El mes de junio fue raro. Me sentía bien físicamente pero después de cada entrenamiento sufría de fuertes dolores en las rodillas. Dejaba de correr toda la semana y como me sentía bien el fin de semana, no podía resistir a la tentación de meterme por el monte. Pero así volvía a estar con los mismos dolores para otra semana. Y una salida por semana, no es entrenar. Así llegué en baja forma a la Gomera Paradise Trail. Desde el principio iba lento y en los últimos 15km me arrastraba. Aun así estaba muy contento porque había conseguido correr mas de 9 horas sin problemas de estómago, comiendo cosas saladas, ningún gel, poco azucares. Y eso fue la principal razón por la que hice la ultra de La Gomera. Coger confianza de cara a futuras carreras mas largas, de que soy capaz de hacerlas sin vomitar, sin tener que sentarme media hora en una piedra, doblado con mareos. Lo más extraño fue que luego no me dolieron las rodillas como las semanas anteriores y casi pensaba que ese problema también se había solucionado. Pero grité demasiado rápido "eureka". Sigo al ritmo de un entreno por semana y dolor de rodillas el resto de los días.
Debo descansar mas tiempo pero no lo consigo. Me atraen las pistas, los senderos, los bosques. No pensaba inscribirme a la K21 en Los Silos pero viendo que de todas formas, iba a correr en algún lugar, pues, a última hora añadí mi nombre a la lista. Dos días antes hice 15km, lo menos técnico posible, sin ser de asfalto e iba bastante cómodo. Eso me motivó para decidir dar todo en la carrera.
Últimamente mi compañero "vigorexico" es John Benamati ya que Miguel se dedica a cambiar pañales y los demás vigorexicos ya hace tiempo que de vigorexico tienen poco... así que juntos hacemos el largo viaje hasta el extremo noroeste de la isla. Será mi tercera participación. El primer año hizo frío abajo en la Plaza de San Bernardo, pero mucho calor por calima en Erjos arriba. El segundo año hizo un calor tremendo durante toda la carrera y fue muy dura. Esta vez, no hacía ni calor ni frío. Nublado pero seco. Un tiempo ideal para correr.
Salida a las 16h, perfecto para mi. Nada de madrugar. Había trabajado toda la mañana pero eso vino bien para aprovechar el día y estar en modo "activo". Los primeros kilómetros son de asfalto, muy rápidos. Había calentado un buen rato y tenía claro que esta vez, cada segundo contaba. Tampoco podía reventar totalmente pero confiaba en mi cuerpo. Ya que es una carrera corta, vuelvo a intentarlo con los geles. Uno antes de empezar y dos en carrera. En ningún momento noté que los había tomado pero no dudo en que aproveché las calorías que aportan.
Empiezo la subida como puedo pero ya estoy acostumbrado a verme superado por muchos corredores. Me adelanta Tere Linares al principio del sendero pero hago todo lo posible para seguir cerca. Por el kilómetro 3 o 4 veo que de repente baja el ritmo, como que necesita un pequeño descanso. Aprovecho para adelantar y reacciono al revés. Meto la siguiente marcha y empiezo una contrarreloj hacía arriba. Adelanto sin piedad y oigo a muchos soltar un "uhfff" cuando paso. Voy hiper-motivado y eso aún mas cuando delante veo primero a Fernando (atleta de mi categoría aunque no puedo competir contra el, mi nivel es muy inferior) y Santi de Correcaminos. Hace dos años, era muy habitual encontrarme con Santi a mitad de subida pero desde entonces su nivel se ha elevado y ya no suelo verlo sino antes de la salida y en la entrega de trofeos cuando recoge el trofeo de su categoría. Poder pillarles era como un chute de doping. Además, un poco mas delante iba John y empecé a gritarle "date prisa que te cojo..." Pensé que iba llegar hasta el y poder intercambiar algunas palabras (como hice con Fernando y Santi: "en esta carrera les voy a hundir, jajaja (risa de película de horror)" jajaja) pero el muy jodido no me dejó acercarme a menos de 20m.
No quiero echarme flores, pero creo que tanto Fernando y Santi, como John, han bajado un minuto de su tiempo por mi aparición. Lo que pasa es que tenía un precio que también pagaría yo... Cuando llego al avituallamiento al final de la subida estaba realmente y totalmente reventado. Aunque se fueron directamente a otro ritmo mis amigos, yo tampoco quise perder la ventaja que había cogido. Ahora tocaban unos cuantos kilómetros muy rápidos donde sabía que me volverían a adelantar corredores jóvenes que tienen mas velocidad punta. Una vez recuperado el aire que me faltaba después de la cronoescalada, me puse a mi ritmo, siempre intentando rozar el límite de sufrimiento y asfixio. La pista es preciosa, con fresquito, debajo de la sombra de los árboles y muy cómoda para correr.
Me tomo el último gel para empezar la bajada porque noto ya cansancio, ha sido todo muy rápido para mi. Además toca pensar en mis rodillas y ya me dijo Basilio antes de empezar: "cuidado en la bajada, con tranquilidad" Nada mas empezar ya dejo pasar dos corredores y me concentro en evitar impactos brutales, ir con fluidez sin forzar el ritmo. Pero oigo detrás la voz de Tere Linares y me propongo evitar que me adelante. Eso es porque el año pasado ella hizo 2h04 (yo 2h06) y suponía que si me quedaba delante, iba mejorar mi tiempo del año pasado (confiando en que atletas profesionales como ella son muy constantes).
La mezcla de prisa por mantener mi posición con el intento de ir suave para mis rodillas funcionó muy bien y se me hizo muy corta la bajada, llegando otra vez al último tramo de asfalto antes de que me lo esperaba.
Por alguna razón no me cuesta demasiado mantener un buen ritmo en esos últimos dos kilómetros y adelanto de nuevo a algunos que me pasaron en la bajada. Me recordó al año pasado, cuando, en los últimos 700m adelanté a Jesus María Prieto sin darme cuenta de que le estaba quitando el primer puesto de nuestra categoría. Pero esta vez tenía a Fernando ya lejos delante y aprovechando la ausencia de Kiko y Jesus María, y por supuesto también Pepe Padrón, podía acceder en el mejor caso al segundo puesto en M50. Al final 2h02:54 y muy satisfecho porque lo dí todo disfrutando al mismo tiempo.
Hay que resaltar el buen ambiente que hubo antes, durante y después de la carrera. Y el gran esfuerzo de la organización y los voluntarios. Me parece fenomenal que con tantas carreras, hay tanta competitividad con el trato hacía el corredor como entre los corredores en carrera...jaja Casi nos llevan en brazos. También agradecer a todos las personas que nos sacaron fotos. Así seguimos disfrutando de la carrera para mucho tiempo.
Cita obligatoria para 2015... Gracias Basilio e Isidro.
CLASIFICACIÓN
jueves, 17 de julio de 2014
martes, 1 de julio de 2014
Desde el infierno en buen camino hacía el paraíso...
Ya tengo otra vez materia para bombardearles con mis historias. Entre las típicas de los hombres, siempre quejándose, y alguna cosita positiva, el título debería de resumir la tendencia. Y espero que sea así, aunque habrá que esperar un poco porque dos días después de la ultra de La Gomera, el cuerpo está aún en un estado "raro".
Es habitual leer por aquí que algo me ha ido mal en la carrera que intento relatar. Quizás no me doy cuenta que eso le pasa a todo el mundo. Pero llegar deshidratado, vomitando en las últimas 5 carreras de larga distancia ya requiere solución.
El plan para intentar no tropezar una sexta vez con lo mismo era un cambio radical de mi alimentación. Evitar desde el principio la pérdida de volumen de sangre por el sudor, aportando líquidos y sales. Y evitar los azúcares rápidos, añadir grasas, ya que con mi ritmo en las ultras, las bombas de azúcar tienen efecto contrario. Ese último factor era el difícil ya que tanto las bebidas isotónicas y los geles, las barritas, la fruta... casi todo aporta principalmente azucares. Había probado llevar bocadillo de jamón y queso, pero no es práctico, cuesta comerlo corriendo.
Con Miguel ya habíamos hablado de la posibilidad de meter nosotros mismos los ingredientes en la batidora y hacer un preparado que sería más fácil de comer en carrera, ya que masticar mucho es complicado y muchas veces lo que comemos nos hace una bola en la boca, casi imposible de tragar.
Así que me fui al supermercado y compré:
- Almendras
- Cacahuetes salados
- Maiz tostado
- Dátiles
- Higos
- Puré de papas
- cubitos de caldo
Metí todo en una proporción al azar (jaja, fuerte desastre) en la batidora y cuando el motor ya empezaba a oler quemado, la paré. El aspecto de lo que salió no era muy apetitoso.pero el sabor era muy parecido a la conocida crema de cacahuetes. Lo dividí en dos raciones y la primera la llevé al entrenamiento del faro a faro en Anaga hace una semana para probarlo. Solo hicimos 25km pero tardamos 5 horas y aunque poco podía decir del resultado, sobreviví sin malestar ni síntomas de envenenamiento. Así que a La Gomera con la otra ración.
No puedo evitar quejarme un poco mas, pero llegué a La Gomera con muy poco entrenamiento por dolores en las rodillas y piernas cansadas y pesadas desde ya hace unas semanas. Hasta un par de días antes de la carrera pasaba de vez en cuando por mi cabeza no ir y descansar. Sería lo mas inteligente. Pero necesitaba probar mi potingue. En La Gomera, con acabar sin vomitar, me daría por satisfecho ! (si quieren saber como la hice el año pasado: Gomera Paradise 2013)
Fui junto con Jon Benamati, un nuevo "Vigorexico total", Italiano afincado en El Médano y igual que todos de nuestro grupito, con raíces de windsurf, reconvertido en atleta con 40 años. Ha llegado como una bomba a este deporte. Lleva solo 6 meses y ya ha hecho dos maratones, dos ultras y unas cuantas carreras mas cortas. Se apunta a todo y acaba habitualmente entre los 15 primeros. Y como buen vigorexico se queja de lo difícil que es entrar en el top10...jaja. El año que viene se quejará de lo difícil que es ganar una carrera... (Y tiene otra bomba preparada en casa. No sé si algún día se presentará en carrera, pero su mujer corre igual que el !)
Bueno, volviendo al Gomera Paradise. Viaje en barco tranquilo, recogida de dorsales, descanso en la residencia, cena de la pasta con un par de cervezas para dormir mejor... Y tempranito a la cama porque toca desayunar a las 4 y algo. Como algo, un café para despertar, me preparo y tiro pa'bajo a la linea de salida. Fue todo automático y no me di cuenta que llegué demasiado temprano. Ya habían algunos corredores pero intenté relajarme y evitar coger frío, sentado en un banco, abrigado del viento. Ya se notaba que no iba a hacer tanto calor como el año anterior y estaba nublado.
Me puse atrás del todo en la linea de salida y aunque sabía que me tocaría esperar en el tapón para subir las escaleras después de los primeros 500m, mi táctica sería empezar suave y poco a poco recuperar puestos. Cuando terminan las escaleras toca primero un kilómetro de subida en asfalto. Iba con Basilio Bravo pero se me escapó. No me sentía con fuerzas. Aunque fui recuperando algún puesto de todas formas, no iba al ritmo que suelo ir y mentalmente me decepcionó un poco. Después de 3km ya me quedé anclado en un grupito con los que iría intercambiando puestos prácticamente toda la carrera, en especial con Helena, corredora GOT El Médano. Realmente pensaba que mas adelante dejaría atrás a ese grupito pero no lo conseguí. En la pista después del primer avituallamiento iba corriendo un poquito mas rápido pero con una parada para mear y otra para descarga mayor, se neutralizó mi ventaja. Pero volví a estar con Basilio. Me tuvo que llamar la atención cuando le pasé porque iba trotando con el cerebro apagado, mirando el suelo... como suelo hacer, sin ver a los amigos, jaja. "Eyy, d'Jo, soy yo!, yo, Basilio! Me has visto?..." jajaja. Me pegué un susto y todo. Y por ahí seguía en las cercanías Helena y Yeray de Correcaminos, Bernardo (hermano de Damian) y algunos mas. En el último tramo hacía Hermigua había un cambio en el recorrido, quizás sin variar mucho la distancia pero algo mas técnico. De todas formas, llegué a Hermigua en 4 horas, casi una hora mas que el año pasado. OK, sabía que el año pasado me había forzado demasiado corriendo rápido en la pista pero esto ya era muy lento. Me notaba igualmente cansado de piernas y con muy pocas ganas pero no tenía molestias en el estómago, ni sensaciones raras al respirar. Había comido cada hora un cachito de mi preparado casero, un donut en el primer avituallamiento, un par de almendras, trocito plátano, un par de naranjas...
La primera subidita entre las casas abajo en Hermigua por escaleras ya deja claro que ahora empieza la carrera. Aunque no hace demasiado calor y sigue medio nublado, el sudor ya será mi compañero para lo que queda. Bernardo, Yeray y algunos mas se escapan, no tengo fuerzas para seguirlos.
Que bonita es la subida de Hermigua al Cedro ! La vista a la cascada, el agua que corre al lado nuestro... Pero vaya subida !!! Chosssss. Escalones cada vez mas altos. El Garmin me marca el kilómetro 36 en 23 minutos... Donde puedo voy cogiendo agua para refrescarme la cabeza y el cuello. Me adelantó Tomás Padrón, subía como un tren, pasaba los escalones como un chavalito sin bajar el ritmo cuando yo me tenía que ayudar con las manos y los brazos, subiéndome tirando de piedras mas arriba, casi escalando. Luego en la bajada volví a adelantarle aunque yo tampoco iba bien. Me dolían demasiado las rodillas, sobre todo en las partes técnicas. Llegamos a un tramo de subida en asfalto y parece mentira, pero es donde mejor iba. Casi sin dolor porque no hay mucho impacto. Justo al volver a meterme en sendero me encuentro con Yeray. Parece sufrir. Creo que le dije algo, pero no me acuerdo qué. Capaz que le he hundido mas aun, no suelo ser de mucha ayuda para animar...jeje. Subimos la segunda parte dentro del parque nacional y luego larga bajada, la segunda parte todo asfalto. Otra vez es donde mejor voy. Alcanzo a algunos corredores mas, hablando un rato con uno de ellos. Y me dice que el año pasado lo hizo en 9 horas pero que nos ve muy justo ahora para entrar en ese tiempo. Penúltimo avituallamiento y empieza la última subida. Los recuerdos del año pasado me dejan pálido y decido empezar directamente con paciencia, pasito a pasito, sin intentar seguir a los colegas con los que llegué al avituallamiento.
El calor es mucho mas soportable pero no quita que es una subida mortal. Me vuelve a adelantar Tomás Padrón, igual que en el Cedro, con un ritmo constante, muy fuerte. Veo que también Helena se me acerca. Está haciendo una muy buena carrera. Ni rastro de Yeray detrás, uff, seguramente lo estaba pasando mal.
Ya en llano/bajando, llegando al último avituallamiento, me adelanta Helena. Me pregunta como voy, si necesito algo pero le digo que voy bien, simplemente no puedo dar mas, no tengo piernas. No paro en el avituallamiento, ya estaba perdiendo bastante tiempo caminando de piedra en piedra. Las bajadas técnicas están bien cuando no te duelen las piernas, cuando tienes fuerzas, y vas saltando los escalones abajo pero yo ya me tenía que poner de lado y coger aire antes de bajar un escalón. Pero pensaba en la cerveza que iban a darme en la llegada y que estaba cada vez mas cerca. Suspiro cuando llego por fin al asfalto donde puedo correr sin parecer un abuelo que ha perdido su bastón. Meta en 9 horas y 20 minutos. Con todas mis quejas 1 hora y 10 minutos mas rápido que el año pasado...y sin vomitar !!! El potingue ha funcionado ! Me seguían doliendo las piernas, pero estaba tan contento que en cuestión de media horita me había mandado ya 6 cervezas. Y eso que la fiesta de la cerveza no había empezado. Bueno, luego decidiría cambiarla por una buena cena ya que bastante borracho ya estaba.
Jon hizo un carrerón, 7h20min. en el puesto 14. Pero impresionante también el ganador que quitó media hora a su tiempo del triunfo del año pasado cruzando la meta en 6 horas y media. Y Ana Belen de Clator que pulverizó el mejor tiempo de chicas con 8 horas y media. (realmente el tiempo que yo quería haber hecho... el año que viene será) Y Helena entró como segunda fémina, 3 minutos antes que yo, felicidades también!
Es habitual leer por aquí que algo me ha ido mal en la carrera que intento relatar. Quizás no me doy cuenta que eso le pasa a todo el mundo. Pero llegar deshidratado, vomitando en las últimas 5 carreras de larga distancia ya requiere solución.
El plan para intentar no tropezar una sexta vez con lo mismo era un cambio radical de mi alimentación. Evitar desde el principio la pérdida de volumen de sangre por el sudor, aportando líquidos y sales. Y evitar los azúcares rápidos, añadir grasas, ya que con mi ritmo en las ultras, las bombas de azúcar tienen efecto contrario. Ese último factor era el difícil ya que tanto las bebidas isotónicas y los geles, las barritas, la fruta... casi todo aporta principalmente azucares. Había probado llevar bocadillo de jamón y queso, pero no es práctico, cuesta comerlo corriendo.
Con Miguel ya habíamos hablado de la posibilidad de meter nosotros mismos los ingredientes en la batidora y hacer un preparado que sería más fácil de comer en carrera, ya que masticar mucho es complicado y muchas veces lo que comemos nos hace una bola en la boca, casi imposible de tragar.
Así que me fui al supermercado y compré:
- Almendras
- Cacahuetes salados
- Maiz tostado
- Dátiles
- Higos
- Puré de papas
- cubitos de caldo
Metí todo en una proporción al azar (jaja, fuerte desastre) en la batidora y cuando el motor ya empezaba a oler quemado, la paré. El aspecto de lo que salió no era muy apetitoso.pero el sabor era muy parecido a la conocida crema de cacahuetes. Lo dividí en dos raciones y la primera la llevé al entrenamiento del faro a faro en Anaga hace una semana para probarlo. Solo hicimos 25km pero tardamos 5 horas y aunque poco podía decir del resultado, sobreviví sin malestar ni síntomas de envenenamiento. Así que a La Gomera con la otra ración.
No puedo evitar quejarme un poco mas, pero llegué a La Gomera con muy poco entrenamiento por dolores en las rodillas y piernas cansadas y pesadas desde ya hace unas semanas. Hasta un par de días antes de la carrera pasaba de vez en cuando por mi cabeza no ir y descansar. Sería lo mas inteligente. Pero necesitaba probar mi potingue. En La Gomera, con acabar sin vomitar, me daría por satisfecho ! (si quieren saber como la hice el año pasado: Gomera Paradise 2013)
Fui junto con Jon Benamati, un nuevo "Vigorexico total", Italiano afincado en El Médano y igual que todos de nuestro grupito, con raíces de windsurf, reconvertido en atleta con 40 años. Ha llegado como una bomba a este deporte. Lleva solo 6 meses y ya ha hecho dos maratones, dos ultras y unas cuantas carreras mas cortas. Se apunta a todo y acaba habitualmente entre los 15 primeros. Y como buen vigorexico se queja de lo difícil que es entrar en el top10...jaja. El año que viene se quejará de lo difícil que es ganar una carrera... (Y tiene otra bomba preparada en casa. No sé si algún día se presentará en carrera, pero su mujer corre igual que el !)
Bueno, volviendo al Gomera Paradise. Viaje en barco tranquilo, recogida de dorsales, descanso en la residencia, cena de la pasta con un par de cervezas para dormir mejor... Y tempranito a la cama porque toca desayunar a las 4 y algo. Como algo, un café para despertar, me preparo y tiro pa'bajo a la linea de salida. Fue todo automático y no me di cuenta que llegué demasiado temprano. Ya habían algunos corredores pero intenté relajarme y evitar coger frío, sentado en un banco, abrigado del viento. Ya se notaba que no iba a hacer tanto calor como el año anterior y estaba nublado.
Me puse atrás del todo en la linea de salida y aunque sabía que me tocaría esperar en el tapón para subir las escaleras después de los primeros 500m, mi táctica sería empezar suave y poco a poco recuperar puestos. Cuando terminan las escaleras toca primero un kilómetro de subida en asfalto. Iba con Basilio Bravo pero se me escapó. No me sentía con fuerzas. Aunque fui recuperando algún puesto de todas formas, no iba al ritmo que suelo ir y mentalmente me decepcionó un poco. Después de 3km ya me quedé anclado en un grupito con los que iría intercambiando puestos prácticamente toda la carrera, en especial con Helena, corredora GOT El Médano. Realmente pensaba que mas adelante dejaría atrás a ese grupito pero no lo conseguí. En la pista después del primer avituallamiento iba corriendo un poquito mas rápido pero con una parada para mear y otra para descarga mayor, se neutralizó mi ventaja. Pero volví a estar con Basilio. Me tuvo que llamar la atención cuando le pasé porque iba trotando con el cerebro apagado, mirando el suelo... como suelo hacer, sin ver a los amigos, jaja. "Eyy, d'Jo, soy yo!, yo, Basilio! Me has visto?..." jajaja. Me pegué un susto y todo. Y por ahí seguía en las cercanías Helena y Yeray de Correcaminos, Bernardo (hermano de Damian) y algunos mas. En el último tramo hacía Hermigua había un cambio en el recorrido, quizás sin variar mucho la distancia pero algo mas técnico. De todas formas, llegué a Hermigua en 4 horas, casi una hora mas que el año pasado. OK, sabía que el año pasado me había forzado demasiado corriendo rápido en la pista pero esto ya era muy lento. Me notaba igualmente cansado de piernas y con muy pocas ganas pero no tenía molestias en el estómago, ni sensaciones raras al respirar. Había comido cada hora un cachito de mi preparado casero, un donut en el primer avituallamiento, un par de almendras, trocito plátano, un par de naranjas...
La primera subidita entre las casas abajo en Hermigua por escaleras ya deja claro que ahora empieza la carrera. Aunque no hace demasiado calor y sigue medio nublado, el sudor ya será mi compañero para lo que queda. Bernardo, Yeray y algunos mas se escapan, no tengo fuerzas para seguirlos.
Que bonita es la subida de Hermigua al Cedro ! La vista a la cascada, el agua que corre al lado nuestro... Pero vaya subida !!! Chosssss. Escalones cada vez mas altos. El Garmin me marca el kilómetro 36 en 23 minutos... Donde puedo voy cogiendo agua para refrescarme la cabeza y el cuello. Me adelantó Tomás Padrón, subía como un tren, pasaba los escalones como un chavalito sin bajar el ritmo cuando yo me tenía que ayudar con las manos y los brazos, subiéndome tirando de piedras mas arriba, casi escalando. Luego en la bajada volví a adelantarle aunque yo tampoco iba bien. Me dolían demasiado las rodillas, sobre todo en las partes técnicas. Llegamos a un tramo de subida en asfalto y parece mentira, pero es donde mejor iba. Casi sin dolor porque no hay mucho impacto. Justo al volver a meterme en sendero me encuentro con Yeray. Parece sufrir. Creo que le dije algo, pero no me acuerdo qué. Capaz que le he hundido mas aun, no suelo ser de mucha ayuda para animar...jeje. Subimos la segunda parte dentro del parque nacional y luego larga bajada, la segunda parte todo asfalto. Otra vez es donde mejor voy. Alcanzo a algunos corredores mas, hablando un rato con uno de ellos. Y me dice que el año pasado lo hizo en 9 horas pero que nos ve muy justo ahora para entrar en ese tiempo. Penúltimo avituallamiento y empieza la última subida. Los recuerdos del año pasado me dejan pálido y decido empezar directamente con paciencia, pasito a pasito, sin intentar seguir a los colegas con los que llegué al avituallamiento.
El calor es mucho mas soportable pero no quita que es una subida mortal. Me vuelve a adelantar Tomás Padrón, igual que en el Cedro, con un ritmo constante, muy fuerte. Veo que también Helena se me acerca. Está haciendo una muy buena carrera. Ni rastro de Yeray detrás, uff, seguramente lo estaba pasando mal.
Ya en llano/bajando, llegando al último avituallamiento, me adelanta Helena. Me pregunta como voy, si necesito algo pero le digo que voy bien, simplemente no puedo dar mas, no tengo piernas. No paro en el avituallamiento, ya estaba perdiendo bastante tiempo caminando de piedra en piedra. Las bajadas técnicas están bien cuando no te duelen las piernas, cuando tienes fuerzas, y vas saltando los escalones abajo pero yo ya me tenía que poner de lado y coger aire antes de bajar un escalón. Pero pensaba en la cerveza que iban a darme en la llegada y que estaba cada vez mas cerca. Suspiro cuando llego por fin al asfalto donde puedo correr sin parecer un abuelo que ha perdido su bastón. Meta en 9 horas y 20 minutos. Con todas mis quejas 1 hora y 10 minutos mas rápido que el año pasado...y sin vomitar !!! El potingue ha funcionado ! Me seguían doliendo las piernas, pero estaba tan contento que en cuestión de media horita me había mandado ya 6 cervezas. Y eso que la fiesta de la cerveza no había empezado. Bueno, luego decidiría cambiarla por una buena cena ya que bastante borracho ya estaba.
Jon hizo un carrerón, 7h20min. en el puesto 14. Pero impresionante también el ganador que quitó media hora a su tiempo del triunfo del año pasado cruzando la meta en 6 horas y media. Y Ana Belen de Clator que pulverizó el mejor tiempo de chicas con 8 horas y media. (realmente el tiempo que yo quería haber hecho... el año que viene será) Y Helena entró como segunda fémina, 3 minutos antes que yo, felicidades también!