Trail Almendros y Volcanes - Triatlón Olímpico El Médano

Woow, qué fin de semana. De estos cuando el día de descanso es el lunes ! No es que me lo pueda permitir, pero no queda otra opción. Me queda energía, suficiente para pasar horas en facebook, buscar fotos, clasificaciones y escribir este relato...poco mas.

Realmente quería haber ido a la Haría Extreme en Lanzarote, pero no puedo estar en todos sitios... Como venganza haría dos pruebas el mismo fin de semana, porque opciones hay de sobra. El triatlón de El Médano es una cita a la que no puedo faltar, ya llevo 5 años consecutivos y es en "mi" pueblo. Se celebraba el domingo tempranito por la mañana mientras tenía una carrera de 21km de trailrunning el sábado por la tarde. Ideal, todo seguido...

Sábado, trail Almendros y Volcanes en Santiago del Teide. Segunda edición de esa carrera pero primera par mi. Salida a las 16h de la tarde.
Aunque Santiago del Teide está a casi 1.000m sobre el nivel del mar, la falta de viento y la orientación de esa zona lo convierte en un horno. Ya sufrí su efecto en la Vertical de Los Gigantes a finales de abril así que me iba mentalizando. Ademas, el tema de conversación entre los participantes era una sola palabra: calor.
Fui con Ito, que hacía la distancia corta, 14km y mientras nos preparamos nos encontramos con varios corredores mas del Triabona, su equipo.
La salida se dio detrás de la iglesia, juntas las dos distancias. Aunque no salí muy atrás, en los primeros metros hubieron muchos empujones y codazos para entrar en un callejón, y me encontré, un kilómetro mas lejos, en un tapón parado al entrar en el sendero, probablemente por el puesto 100 aproximadamente. Durante otro kilómetro era imposible adelantar porque eso lo querían hacer todos... Luego empezó a abrirse un poco el "tren" e iba colándome puestos. Subimos hasta media altura la montaña que separa Santiago del Teide del barranco de Masca, para luego seguir una pista en llano hacía Erjos. Luego bajamos otra vez al valle detrás de Santiago del Teide y subiendo el otro lado ya nos metemos en el terreno volcánico. Piedra volcánica suelta, picón como arena, rocas picudas... Un sube y baja por terreno técnico durante varios kilómetros para bajar finalmente a Arguayo. Buen avituallamiento ahí y subida por el otro lado del pueblo en la que la mayor parte se podía correr. Bajada a Las Manchas, y la última subida, bastante dura, pero corta, hasta un avituallamiento donde nos acoplamos con los últimos, bajando en frente, de la carrera de 14km.  En la bajada hasta Santiago del Teide tuvimos que buscar la manera de adelantar a varios corredores de la carrera corta y el último tramo, primero por un camino de piedras, luego asfalto era en ligero descenso, corriendo muy rápido, sacando todo lo que quedaba en el cuerpo. Al entrar en meta oigo por la megafonía que termino en el puesto 16. Muy contento. El calor lo supe controlar bastante, a veces a coste del ritmo, pero evitando entrar en bajón o mareos como tuve en la subida de Los Gigantes. En los avituallamientos me echaba agua encima y en el último cogí unos trozos de hielo que llevé en las manos corriendo, un truco que leí en alguna revista de triatlón. Y funciona. Llegué primero de la categoría M50 con casi 5 minutos de ventaja sobre el segundo de esta categoría, mas de 15 minutos hasta el tercero. Fue una sorpresa porque me había encontrado muy flojo y desmotivado en toda la semana, con agujetas que no se quitaban del último entreno por Guajara y no fui a correr ni una vez. El descanso vino bien. Ito hizo una buena carrera también, tercero en M50 a menos de un minuto del segundo.
Nos dieron paella, pan, refrescos y cerveza mientras esperamos la llegada de los últimos y la entrega de trofeos en la que nos tocó medalla esta vez. Me gustan mas los trofeos artesanales que a veces recibimos, pero la verdad es que ya tengo muchos y ya no le doy tanta importancia. Sería un detalle mas valorado para los que realmente han entrenado duro y fuerte para ganárselo ahí.

Mientras, en El Médano, se preparaba el triatlón. Natalia de la tienda GOT fue a recoger los dorsales del equipo VGRX porque ninguno de nosotros se encontraba por la zona. Cuando llegué de Santiago del Teide puse las pegatinas a la bici y el casco, el dorsal a la cinta y dejé preparado el mono, traje, gafas de natación, zapatillas... Intenté acostarme pronto pero aún estaban temblando mis piernas del trail y me iba revolcando en la cama buscando como relajarme. El despertador estaba puesto a las 7h15 ya que solo tenía que levantarme, coger las cosas e ir hasta boxes con la bici para dejarla antes de las 8. Es cómodo tenerlo a 500m de casa... No me apetecía desayunar pero forzándolo tragué un plátano y un pan seco que cogí en la paella el día anterior. No tardé nada en dejar la bici en boxes y volví a casa. Pude echarme otros 20 minutos porque la salida era a las 9 y no tenía ningunas ganas de calentar. En casa ya me puse el traje y con el gorro y las gafas en mano me fui otra vez a la plaza. Nos llamaron a todos debajo del arco de meta para explicar el recorrido y anunciar que primero saldrían las chicas y veteranos 2, luego los demás. Pasamos por el control del chip en la entrada a la playa y como buenos "gentlemen" dejamos a todas las chicas en primera fila, luego nosotros, los abuelitos.
La salida de esta manera es muy cómoda, nada de pelea ya que somos muy pocos. Mucho no puedo comentar sobre la natación. El mar estaba bastante movida y de vez en cuando no pude evitar tragar algo de agua. Eran dos vueltas y en la segunda, en los útimos 200m, me adelantaron los dos primeros de la verdadera carrera, Raul Lecuona y Juan Luis Diaz Barroso. Luego llegando a la orilla también me adelantó Andrea Demaestri, nuestro chef heladero que tiene mucho talento en el agua. No conocía directamente a mis rivales de veteranos 2 pero tenía claro que la mayoría la tenía delante ya en sus bicis. Últimamente no cojo la bici y recuperar puestos fue difícil. Me adelantaban los primeros grupos de las otras categorías y no les aguantaba la rueda mas de 500m. En uno de estos estaba Ibán aunque su grupo aún no se había formado del todo. Volviendo de Los Abrigos en la primera vuelta alcancé a Jan Mikael el Vikingo del TXTM. A falta de grupo fuimos haciendo relevos entre los dos. Llegando al Hotel Playa sur nos cogieron unos cuantos e intentamos seguirlos pero la última subida para volver al pueblo tiene como claro objetivo romper los grupos... Algunos meten hachazo a muerte ahí y todo se separa. Conseguí seguir algunos pero Jan Mikael se quedó. Pero el grupo estaba roto. Empecé la segunda vuelta otra vez solo y al llegar a Sotavento me cogió otro pelotón con Simon Gil. Ellos volaban. Antes de llegar a La Mareta ya había tenido que soltar y les perdí de vista en nada. Al llegar a mi último giro en el cruce de Atogo vi que tenía a Riccardo Meringolo ya cerca delante. Pero bajando, hasta la rotonda de Los Abrigos, no conseguí ni acercarme. Luego, en la siguiente subida fui a muerte para cogerlo aunque no fue hasta llegando a La Mareta que pude acoplarme a su rueda. No llevaba ni 10 segundos cuando él notó mi rueda delantera cerca. Miró y dijo "ja, tú. Ponte delante que llevo mucho rato solo y luego en la carrera a pie vas tu mas rápido" Jajaja. O Mejor Pfffff. Bueno. Somos amigos. Tiré lo que pude y subiendo al cruce del hermano Pedro vi que otro grupo estaba ya muy cerca detrás. Se lo dije a Riccardo y aflojamos un poco. De nada sirve luchar ahí solo, teniendo un grupo 20m detrás. Pero no duró mucho la gloria. Bajando hacía hotel Playa Sur todos aflojaron y hubo un juego de táctica ya que tampoco se había hecho ningún relevo en la subida anterior. Pasé de sus juegos y me fui solo. Claro, 100m. Igual que en la primera vuelta, utilizaron la última subida para romper totalmente el grupo. Se me fueron dos o tres pero seguí a otros tres. Ya ni relevos ni nada. A muerte. Y Riccardo, al igual que Jan Mikael en la primera vuelta, se quedó. Bajando al pueblo me relajé un poco para no llegar asfixiado a boxes e hice una bastante buena transición a la carrera a pie. Pero mis piernas no parecían tener muchas ganas de moverse. Iba trotando y me adelantaban de dos en dos. En la segunda vuelta empezaba a encontrarme un poco mejor y por el camino, Diego de Tartaruga me dio un gel. Tomé otro en la tercera vuelta y los últimos 500m iba corriendo bien y cómodo. Pero de poco servía ya, raspar segundos... Lo bueno es que llegué a meta con buenas sensaciones. No había sido tan agónico como mis últimos triatlones, hasta disfruté. Aun así hice la carrera a pie con cerebro apagado, ignorando todos los ánimos que me gritaban los amigos y conocidos, algo por lo que les debo disculpas.
El resto del equipo también hizo muy buena carrera. Miguel hizo algo parecido al año pasado. Participar por participar (mas o menos igual que yo) y para evitar la pelea de la natación empezó el último... Eso le costó un buen puesto para pillar un grupo bueno en bici y tuvo que trabajar mucho para apenas recuperar 2 minutos sobre Kike que sí pudo aprovechar su nivel de natación para acoplarse en la bici. Luego Miguel fue corriendo de menos a mas hasta adelantar a Kike y sacarle 4 minutos, según Kike, por culpa de una lesión en una pierna. No me extraña porque mucho no ha entrenado y viendo su resultado, comparando con el año anterior, iba a por un récord personal.
Luego Ibán es una historia aparte. Desde que se tomó el triatlón mínimamente mas en serio con unos entrenos duros para poder acabar el Ironman de Lanzarote, se elevó a otro nivel. Aunque generalmente se entrena un Ironman con salidas largas y lentas, su falta de tiempo y horarios de trabajo le obligaron a trabajar en corto e intensivo. Pero todos los días sin descanso, hasta coger fondo suficiente, consiguiendo un ritmo muy alto al mismo tiempo. Opino que su mejora nadando ha sido mental, ir mas con cabeza y menos bruto. En bici es casi inexplicable su mejoría, aunque no tiene mucha ciencia: sufrir cada vez que subas al sillín. Se ha convertido en su disciplina con mejor parcial. Y corriendo ha aprendido aguantar su ritmo infernal durante toda la carrera, probablemente por tener mas fondo y mas experiencia.
El resultado en el Ironman fue espectacular y aquí en El Médano confirmó su verdadero nivel entrando en meta en séptimo lugar, a tan solo 5 segundos del 5º. Su carrera a pie fue fácilmente mejorable y tenía el 4º puesto de la general a su alcance, aunque eso siempre es fácil decirlo después...
De todas maneras, se llevó un trofeo siendo el primero empadronado en este municipio, Granadilla de Abona. Yo no lo sabía seguro hasta consultar la clasificación pero había quedado por segundo año primero en veteranos 2.
Creo que nos fuimos todos muy contentos después de un día mas unidos como equipo con además unos rumores casi confirmados de tener un socio nuevo entre los Vigorexicus, nuestro amigo Riccardo Meringolo. Tiene síntomas claras de vigorexia, tiene más zapatillas que su mujer y corriendo por las calles del pueblo suele preguntar por donde es hacía Lanzarote...jajaja.

Clasificaciónes Trail Almendros y Volcanes: 14km - 21km
Clasificación Triatlón El Médano