lunes, 2 de julio de 2012

Gomera Paradise Trail

No sé si vale la pena escribir algo que no es sobre fútbol un día como hoy... Pero por si queda alguno por allí que le pueda interesar... Así es como he vivido el primer Gomera Paradise Trail:
Teníamos (Miguel y yo) intención de llegar a La Gomera el viernes antes de las ocho de la tarde desde Los Cristianos con el ferry de Fred Olsen, pero una hora y media de retraso nos hizo llegar cuando algunos ya estaban acostados y descansando para el madrugón. Pero gracias a la impecable organización, no perdimos mucho más tiempo. Nos estaban esperando a la salida del barco, nos llevaron a la entrega de dorsales y de allí a la cena de pasta. Dos platos grandes de macarrones, dos cervecitas y también me llevaron a la residencia escolar donde tenía reservado el alojamiento, junto con muchos otros corredores. (Miguel vino con su "familia" y reservó un apartamento para estar más tranquilo.)
La habitación compartida con otros 5 corredores tenía los nombres de los ocupantes apuntados en una hoja en la puerta y llegué junto con un chico de la península que vive en Tenerife, cuando los demás ya estaban acostados. Solo quedaban camas libres en la parte alta de las literas. En un principio no me importaba, pero en seguida me di cuenta de que después 50km corriendo por el monte, no iba a ser fácil volver a meterme o bajarme de esa cama... Fuera soplaba un viento huracanado en rachas escalofriantes que silbaban en las persianas de las ventanas de la habitación y por los pasillos golpeaban las puertas mal cerradas como si fueran explosiones. Seis hombres en una habitación y ni un ronquido... Es que nadie dormía...
El mayor de la habitación tenía 69 años y tiene un horario de jubilado. El desayuno, lo servían a las 5 pero ese señor encendió la luz y nos despertó, recordándome el servicio militar, a las 4 ! Me di cuenta de que de algo me había olvidado traer... un reloj. Me levanté pero cuando vi que no habían abierto el comedor y que faltaba una hora, volví a acostarme. No sé adonde fueron los demás a esa hora. ¿todos juntos en la ducha hasta las 5?
Cuando abrieron el desayuno bajé a tomar un bocadillo, un plátano y dos tazas de café y volví a la cama. Necesitaba descansar mas, no me veía corriendo a esas horas, aún de noche...
A las seis y media, cuando faltaba media hora para la salida, llegué caminando desde la residencia, a la plaza donde estaban preparando la salida. Me encontré con Miguel, saludamos a unos cuantos conocidos y sin retraso se dio la salida de la prueba a las 7 de la mañana cuando el cielo empezó a coger su color azul con la primera luz del sol.
Salimos desde la plaza de San Sebastián de La Gomera por una calle estrecha y a los 200m ya nos meten por unas escaleras donde tengo que esperar mi turno para subir al no haberme puesto en las primeras filas. Más escaleras, un trocito de asfalto y otras escaleras... En unos minutos ya estabamos a una altura desde la que se veía San Sebastián despertándose. Otro tramo de asfalto subiendo y lo dejamos para entrar en una pista con subidas más fuertes, ya dejando de correr de vez en cuando cuando la pendiente lo hacía demasiado duro.
Había intentado ir al baño antes de empezar la carrera pero ese horario me lo complicaba. Antes de salir se lo comenté a Miguel y me dio un poco de papel que llevaba por si acaso... Después de 20 minutos ya tenía problemas de estómago. El bocadillo a las 5 de la mañana, cuando mi cuerpo estaba totalmente en estado de reposo nocturno, empezó a dar vueltas y empujar tanto hacía arriba como abajo. Un poco más tarde tuve que separarme del recorrido para aliviar un poco. Aún así seguí con un malestar en la barriga mientras cambiamos la subida por nuestra primera bajada. Mas adelante, cuando pregunté a un corredor al lado mío, cuanto tiempo llevábamos en carrera, me contestó que casi dos horas, por lo que decidí tomarme ya un gel, aunque no me apetecía nada. En ese momento íbamos alternando correr con marcha rápida por una carretera asfaltada, subiendo hasta el final de un barranco con varios embalses, casi vacíos. El viento seguía soplando con rachas muy fuertes, a veces de frente, a veces aplastándonos contra el acantilado y otras intentando empujarnos por el precipicio del barranco. Donde terminaba el asfalto, empezaba una de las subidas más temidas de la carrera aunque no me dí cuenta de su dureza. El malestar de estómago ya había desaparecido y supongo que ese primer gel me aportó un extra de energía. Sin embargo, cuando llegué arriba, al avituallamiento donde la carrera se dividía entre los que hacían 27km y 51km, me preguntaba porque no me había apuntado a la corta. Ya no podía más y calculando que no habíamos hecho ni siquiera 20km con casi 3 horas en carrera, un diablito en mi cerebro decía que no iba a  poder acabar eso. Pero en seguida consulté la otra parte del cerebro y me dijo que de momento iba seguramente en el primer tercio de corredores y que, hasta no quedar último, había que seguir. El tema era acabar y si necesitaba descansar, lo haría.
Seguimos subiendo un poco más hasta el punto mas alto en la carrera, 1150m sobre nivel del mar, pasamos una ermita y llegamos al borde del parque Garajonay que ofreció unas vistas impresionantes. Desde allí empezó una bajada larga en la que el cansancio ya no me dejaba correr como quería. No era demasiado difícil, pero estaba agotado y me adelantaron bastantes corredores. Ya había tomado mi segundo gel pero no hay milagros. No he entrenado bien para una carrera tan larga y lo pagaba con sufrimiento. Llegamos a un mini-pueblo que calculaba a media carrera pero ya sin tener idea de cuanto tiempo llevaba corriendo. Avituallamiento, un poco de asfalto y entramos en un sendero ancho, mas bien una carretera sin asfaltar, que subía como una serpiente y en la que solamente dejaba de correr en las curvas donde la pendiente era mas pronunciada. Pasitos cortos y lento, pero corriendo. Cuando parecía que ya habíamos llegado arriba, en un cruce con otra carretera asfaltada, el recorrido gira casi 180 grados y nos metimos en una pista que seguía subiendo. Pensaba que había recuperado ya un poco y que iríamos bajando hacía una playa que sabía que nos tocaba cruzar pero un sube y baja nos vuelve a llevar hasta mil metros de altitud, un poco por debajo de la ermita que habíamos pasado ya hace unas horas, como si fuera un lazo enorme. Otro avituallamiento y empezamos a bajar muy poco a poco, bordeando un barranco gigante, muy bonito con vistas a Playa Santiago. Parecía que bajamos, kilómetros y kilómetros, pero el mar se seguía viendo desde una considerable altitud hasta que de repente empezamos a bajar de verdad por un camino de piedras exageradamente irregulares y con un desnivel vertiginoso. Imposible correr y con escalones que sobrecargaban los cuádriceps.  Para un ratito no importa, pero bajamos un desnivel de 400m de esa manera. Para colmo estábamos ya con el sol encima y protegidos del viento, sufriendo un calor intenso y todos los liquidos consumidos. Al borde de los calambres llegué por fin a la playa, seco como un lagarto. El avituallamiento en ese lugar tenía un par de sillas y si no haces la carrera dirías que quién se le ocurre sentarse en una silla en medio de una carrera. Aproveché para llenar los bidones y coger algo de fruta mientras esperaba que alguien dejara su silla... No quería perder demasiado tiempo, pero vi que todos los que me rodeaban tampoco se iban... Mientras no perdía mas puestos, aproveché el descanso. Faltaban 7 kilómetros decían pero solo ver el acantilado que teníamos enfrente era suficiente para recalcularlo y afrontarlo con paciencia. Detrás del acantilado bajamos a otra playa, la cual cruzamos por callados y arena, para volver a subir, ya suponiendo que por última vez. Y bueno, casi. Solo faltaba cruzar otro barranco pero sin bajar a nivel del mar y desde allí ya iba corriendo con la motivación de estar cerca de la meta. Finalmente aparece la bahía de San Sebastian con bonita vista sobre el muelle y el pueblo. De la bajada al pueblo no me acuerdo nada. Iba extasiado hacía el final de una carrera que fue mucho mas dura que lo que me esperaba pero darme cuenta que iba corriendo por el paseo a escasos metros ya de la meta, después de 50 kilómetros y 6000 metros acumulados de desnivel, sin dolores ni molestias, vivo y sano, me provocó un estado de intensa alegría. En varias ocasiones durante la carrera me pregunté porque hacía esto, casi enfadando me conmigo mismo, pero la sensación al cruzar la meta es la respuesta a esa pregunta.
Mientras el equipo de Gesport Canarias apuntaba mi tiempo, Kenty Siverio iba anunciando mi llegada y allí estaban Miguel, Patricia y Gara esperándome. Abrazos, felicitaciones. Miro el reloj de la organización: 7h45min. No me lo puedo creer. He estado corriendo casi 8 horas ! Me acordé de un corredor al lado mío, cuando aún no habíamos empezado la bajada a la primera playa, diciendo que por la distancia que llevabamos y calculando lo que quedaba, pensaba entrar en algo menos de 7 horas... Llegó media hora detrás de mi... Iba escuchando comentarios, hasta de gente con mucha experiencia en trail, y parece que la dureza de la carrera sorprendió a todos. Miguel me comenta que llegó 4º a pocos minutos del 3º, en menos de 6 horas y media. Me metí un ratito con las piernas en una piscina de agua helada, estiré y Miguel apareció con la primera cerveza. Había paella, pero mi estómago aún necesitaba un pequeño descanso antes de ingerir comida. La cerveza entró sin problemas. Otro rato y ya apetecía la paella ofrecida por la organización. Llega la primera fémina,  8 horas y media, ovación. Llegan Tere Linares y Pili Ramos, segunda y tercera chica, cogidas de la mano. Sus caras hablan libros, da miedo mirarlas, emoción, rabia, alegría, agotamiento, todo se mescla.  Llegan Pedro y Fernando de Buho trail, emoción. Pedro lo pasó mal pero Fernando tiró de el hasta el final. Casi nueve horas... Y sigue entrando gente, agotados pero la mayoría con cara de alegría por haber acabado ese gran reto.
Antes de enfriarme demasiado, vuelvo a la residencia escolar...ayayyay, 15 minutos más caminando... Veo un taxi y casi lo paro pero finalmente pienso que si he podido correr 50km, qué mas da caminar un par de kilómetros mas...jajaja. Ducha, descanso (y si, conseguí subirme a mi cama, también volver a bajarla después) y a las 8 de la noche bajo otra vez a la entrega de trofeos. Los resultados están colgados, como ya dije, Miguel 4º y yo en el puesto 36 pero sin trofeos porque las categorías son diferentes, con senior hasta 40 incluido y veteranos1 de 41 hasta 55... Me quedo con curiosidad de saber mi puesto en categoría veterano normal a partir de 50 aunque de todas formas, durante la carrera me ha preocupado mas lo de intentar sufrir menos que llegar antes. Viendo que finalmente el cuerpo lo aguanta, haciendo mas carreras de este estilo ayudará a fortalecer la mente que es la que hace la diferencia entre sufrir y disfrutar, y aunque en una primera reacción casi todos dicen que "nunca mas", allí estaremos en la siguiente...
Muchas gracias a la organización y todos los compañeros por poder compartir esas sensaciones.



9 comentarios:

Anónimo dijo...

Enhorabuena Jo...tuvo que ser terrible por lo que cuentas.lo del jubilado es para matarlo que cabron!!! jajjaaj
Ya he visto que Miguel esta hecho un maquina...joder si se hubiera recuperado de la lesión antes...lo tenemos en Londres 2012..que fiera....
y tu pararando a cagar y todo jajjaajaj Has hecho un carreron...y te has sobrado tiempo para hacer la cronica...jajaja no como el Santi que corrio 14 km de nada en el medano y nos tiene abandonados....ademas, no encuentro las clasificacions del medano por ningun lado...
Yo en el medano, solo vi pasar a los primeros de la de 25 por el paseo de madera de la playa...y vi a Iban segundo...creo que en esa carrera hubieramos conseguido unos pustos interesantes....porque a partir del 6º eran caras conocidas que suelen quedar detras de nosotros....pero mi estado etilico no me permitia correr ni 25 ni 12 jajajjaj...
Enhorabuena para ti, para Miguel..y supongo que para Iban tambien....
AVR

Anónimo dijo...

PARECE QUE HACE SOLO UNOS DIAS,CUANDO MI COMPAÑERO DE EQUIPO BUHO TRAIL PEDRO Y YO NOS ENCONTRAMOS CON MIGUEL Y D¨JO EN LOS CRISTIANOS.NUNCA LO OLVIDARE,NOS DISPONIAMOS A HACER NADA MENOS QUE 100 KM.........LOS BIGOREXICUS NOS DIJERON:ESTAIS LOCOS,LO QUE VAIS A HACER ES UNA BARBARIDAD......AHORA ME LOS ENCUENTRO EN LA GOMERA HACIENDO UN TRAIL DE CASI 53KM Y UN DESNIVEL ACUM ULADO DE 8.000M.....UFFFFFF!!!!!!! EL SUPER CRAK DE MIGUEL ENTRA EN 4 PUESTO Y D¨JO EN 8HORAS.......OLE SUS COJONES AMIGOS!!!! PARA NOSOTROS ES UN ORGULLO CORRER CON USTEDES.MUUUUCHAS GRACIAS D´JO POR NOMBRARNOS EN TU CRONICA.UN ABRAZO.FERNANDO AGUILAR

Lola Maria Arduengo Schulz dijo...

No hay palabras para descubrir la dureza de la carrera... ni la emocion de entrar a meta sin lesion!!! Enhorabuena... en mi habitación no habia jubilados, todas las chicas coincidimos levantarnos a las cinco menos 10 y cumplimos!!!... Quizas nos veamos el año proximo.. cuando la memoria me juege la mala pasada del olvido!!!

djodlight dijo...

Muchas gracias por vuestras reacciones ! Y con todo el respeto hacía "el jubilado" que se llama Gregorio, es de La Palma y con su edad ha hecho varias Transvulcania !!! (Aunque no entiendo porque se levantó a las 4...)jaja.

Unknown dijo...

d´jo...espectacular la crónica!!!...Sinceramente es sorprenderte ver como te acuerdas con tanta exactitud del recorrido,las sensaciones y sobre todo la gran capacidad de comunicación que tienes. Quien no la ha hecho y la lee seguro que se hace una idea bastante real de lo que allí se vivió.
Felicidades a ti y a Migue por la gran carrera, y al resto de "compañeros" por tener el coraje de acabar algo tan duro ante el peor rival de todos... nosotros mismos...
Pili Ramos

kike dijo...

Enhorabuena chicos! Es un honor ser vigorexico aunque no pueda ni compararme a vosotros

kike dijo...

Enhorabuena chicos! Es un honor ser vigorexico aunque no pueda ni compararme a vosotros

P. Dávila dijo...

D''JO: Simplemente "fantástica".Espectacular relato de la Ultra gomera Paradise....ufff, chiquita cuerada nos dimos eh!!.....pero como tu bien dices, la respuesta a esa pregunta que nos hacemos tantas y tantas veces en estas ultras de: "¿Que hago yo aquí?"....o " nunca mas"...la encontramos al cruzar el arco....que satisfacción!!..ya con estar en la salida tiene mucho mucho valor , por lo menos bajo mi humilde opinión. Efectivamente, sufrí mucho en esta ocasión, me atrevo a decir que mas que en la Bluetrail, pero ahí estaba la cabeza y mis grandes, grandísimos compañeros de BUHO TRAIL CLUB, Fer y Piru, ¡¡que amigos!!....ENHORABUENA una vez mas D''JO, por tu carrerón y por este regalo en forma de crónica y a Miguel, ¡que cracks los 2!....ahh!! Y muchas gracias por acordarte "una vez mas" de nosotros. Pedro Dávila Búho trail club.

Anónimo dijo...

Jo estaba releyendo tus cronicas....y creo que hacer trampa tio...llevas un cadernillo y vas apuntando sensaciones y cosas del recorrido porque si no es imposible...yo en la de buenavista.2 horas despues de la carrera era incapz de vsualizarla en orden cronologico...y tu sabes hasta las planta que hay al lado del camino...lo dicho tio, que aparte de poner rocas en a playa del medano en invierno con la marea baja...llevas una agenda ne las carreras para tomar notas y eso es trampa jajjajaaja

cuidate y a ver si este finde tengo tiempo para reflexions sociopoliicas jjajajjajaja
AVR
AOCISA TRAIL RUNNING

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