lunes, 2 de abril de 2012

XVI Media Maratón Las Galletas, objetivos cumplidos

De cierto modo, los VGRX han fallado este fin de semana porque nadie fue al duatlon de Tejina, pero por otro lado hubo una circunstancia importante y fue que estaríamos TODOS juntos en la media maratón de Las Galletas. Y en este momento eso es Kike, Miguel, Ibán, Ciro, Diego, Patricia y d'Jo. Creció un buen pique para hacer buenos tiempos y fuimos todos con bastante ilusión a correr la carrera. Miguel sigue lesionado, pero no aguantó más tener que leer después lo bien que lo pasamos y se apuntó apoyado por unos parches que tendrían que aliviar su dolor al mejorar el flujo de energías por el cuerpo... Parece haber funcionado. Quizás pronto hablamos más de este tema.
Llegamos a Las Galletas a las 8h10 y ya fue difícil encontrar un sitio donde dejar los coches. Repartimos los dorsales, últimos preparativos, calentar y nos perdimos un poco pero ya en la linea de salida nos volvimos a encontrar todos juntos menos Ibán que, como costumbre, se coloca a escasos centímetros de Vaquero para salir como un cohete y como dijo bromeando, para salir en la foto del cartel del año que viene... El resto del equipo salimos todos juntos. Una vez en carrera no se mira hacía atrás y el único que yo veía era Miguel (Iban ya estaba fuera de vista). Estaba bastante convencido de que Kike me tenía controlado por detrás y como todos enfocamos a 1h30, iríamos cerca. Miguel es escapó poco a poco pero después de 5km bajó el ritmo y lo adelanté. No quise preguntar nada porque sé que debería de correr mucho más rápido y si yo lo adelantaba, algo estaba mal. En la primera bajada llegando otra vez a Las Galletas me volvió a adelantar y hablamos algo. Mi conclusión era que, después de tanto tiempo sin correr por la lesión, perdió las sensaciones y no se había dado cuenta de que iba muy lento...jajaja. Después de que le dije que así de milagro conseguiríamos 1h30, se despertó y se marchó...
Ya es la tercera vez que corro la de Las Galletas y sabía como iba ser la carrera. La primera mitad de la segunda vuelta es mi momento crítico. Iba hundiéndome y a la altura de la rotonda del Fraile, me tomé mi primer gel y me relajé un poco. Me adelantaron algunos corredores pero no fueron muy lejos. Antes de llegar a la siguiente rotonda, la del Palmar, ya estaba otra vez con ellos. El tramo más duro de la carrera es la siguiente recta de 3km en falso llano. Lo sé e intento no pensar en ello, correr a ritmo y distraerme con pensamientos diferentes. Después del avituallamiento, más o menos en el km 15, noto como alguien corriendo detrás de mi me tira agua al cuello. Con el calor que hacía, se agradecía. Oí la voz de Kike. A mi me quedaba un buche en mi botella y sin mirar lo eché hacía atrás pero creo que no salió nada. Se quedó un rato pisándome los talones hasta que apareció Norman que nos adelantó con una postura rígida como una estatua marcando un ritmo diferente. Kike fue detrás y yo decidí concentrarme un poco más también para no dejarles escapar. Lo que no sabía era que también estaba Diego allí pero creo que en ese momento de batalla con Norman, Kike y yo, el no reaccionó y se quedó. No es que subimos mucho el ritmo, pero un poco seguramente si, porque adelantamos a varios corredores. Cuando empieza la bajada y los últimos 3km a meta, Kike y Norman se me fueron más de 100m y me tomé otro gel. Me adelantó otro corredor que había estado a mi altura desde el principio y me fijé en que corría con más cadencia. Me sincronicé a ella y en seguida noté que iba más rápido con menos esfuerzo. Juntos veía como nos acercábamos a Kike. Cuando quedaban 500m no podía aguantar más el ritmo de bajada y aunque me intentaba animar el colega, tuve que soltar. Vi como él pasaba a Kike y yo me quedé a unos 50m. Lo dí todo en los últimos metros y llegué a nada más que 7 segundos detrás, lo mismo que le sacaba Norman a Kike, terminando los tres por debajo de 1h30 por segundos. Bastante apasionante si lo lees pero la verdad es que lo pasé mal cada segundo de esos 89 minutos, no fue nada divertido. Hice una carrera mental en la que no soltaba una sonrisa ni una palabra para no perder el ritmo de respiración y esfuerzo. Pero todo eso se olvida rápidamente cuando, detrás de la meta, compartes las sensaciones y experiencia con los amigos y colegas del equipo.
Ibán entro en 1h23 aprox. y Miguel terminó en 1h27.
Diego llegó dos minutos después de nosotros, o sea en 1h32, una gran carrera como debut en media maratón y poco tiempo entrenando. Ciro entrena una vez al año y aún así consigue entrar en 1h42, y otra que no entrena pero acaba todas las carreras es Patricia, esta vez con un tiempo de 2h03 y según cuenta, con varios intentos de abandono pero reanimada por los que iban a su alrededor. Hay que admitir que de divertido tiene muy poco una media maratón como la de Las Galletas. ¿Porque se presentan 500 locos a sufrir casi dos horas ? Hoy es la pregunta y mañana buscamos como inscribirnos a la siguiente...
Lo acabamos todos juntos con un almuerzo en El Médano. Quizás tardaremos en volver a participar todos juntos. En el trail Macizo de Anaga, puede que estemos casi todos.

RESULTADOS


3 comentarios:

Anónimo dijo...

donde es ese almuerzo en el medano?

Anónimo dijo...

Diego me prometio a una pizza por arrastrarlo hasta la meta o sea que....

kike dijo...

La comida, fabulosa, en Patacca, El Medano. Ha sido lo único que he echado en falta en el relato de Djo.

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